El proceso de pollo crudo abarca desde la crianza de las aves en la granja hasta su llegada a la mesa del consumidor. Este proceso involucra una serie de pasos cruciales para garantizar la calidad, frescura y seguridad del producto final.
Se seleccionan razas de pollos específicas por su calidad de carne, sabor y rendimiento. Las razas más comunes para la producción de carne incluyen Cornish Cross, Cobb Broiler y Ross Broiler.
Las aves se crían en instalaciones modernas y espaciosas, con acceso a agua fresca, alimento nutritivo y luz natural. Las instalaciones modernas pueden ser galpones cerrados o sistemas de pastoreo al aire libre.
Se implementan prácticas de crianza éticas y responsables que garantizan el bienestar de las aves. Estas prácticas pueden incluir acceso a espacios abiertos, perchas para posarse y enriquecimiento ambiental.
Las aves se alimentan con una dieta balanceada y nutritiva que incluye granos, proteínas y vitaminas. La dieta se formula cuidadosamente para satisfacer las necesidades nutricionales de las aves en cada etapa de su crecimiento.
Las canales de pollo se clasifican por tamaño, grado y tipo de corte. El tamaño se refiere al peso de la canal, el grado se refiere a la calidad de la carne y el tipo de corte se refiere a las diferentes partes del pollo que se comercializan.
Las canales de pollo se pueden cortar en diferentes piezas, como pechugas, muslos, alas y piernas. El corte se realiza manualmente o con máquinas cortadoras especializadas.
Las piezas de pollo se empaquetan en envases de plástico o cartón para protegerlas y facilitar su transporte y almacenamiento. Los envases se diseñan para mantener la frescura del pollo y evitar la contaminación.
El pollo se transporta en camiones refrigerados para mantener la temperatura adecuada y evitar el deterioro. La cadena de frío se mantiene durante todo el transporte para garantizar la seguridad del producto.
El pollo se almacena en refrigeradores o congeladores en las tiendas minoristas para garantizar su frescura. La temperatura de almacenamiento se controla cuidadosamente para evitar el crecimiento de bacterias.